China cuenta con una gran variación climatológica dependiendo de la zona en la que nos encontremos; y es que lo evidente es lo evidente, China es muy grande, además de contar con regiones bastante diferenciadas topográficamente hablando.
Con cierto componente monzónico, las lluvias son más habituales y abundantes en la parte sureste del país. Incluso podemos encontrar zonas con clima realmente extremo, en el que el verano, o por lo menos las temperaturas agradables, pocas veces se ven.
El invierno en la parte norte de China cuenta con inviernos bastante duros. Así, de diciembre a marzo quizá no sea una buena fecha para viajar a lugares como Beijing, donde se han registrado temperaturas de -20ºC por la noche.
Más al norte de esta ciudad, podemos encontrar zonas en las que el invierno puede alcanzar los -40ºC. Sin duda una temperatura que pocos podríamos aguantar.
Asimismo, los veranos en esta zona de china pueden ser también extremos, con temperaturas de hasta 38ºC en Beijing y que además coinciden con la época de más lluvias.
La primavera y el otoño son realmente agradables; y es que encontramos temperaturas en la zona que irán de los 20ºC a los 30ºC. Sin duda alguna temperaturas mucho más recomendables para poder visitar las ciudades de esta parte de China.
El corazón de China está dominado por el valle del río Yangtze. La temperatura en invierno es bastante similar a la que podemos encontrar en las zonas del norte del país. Así, los meses invernales los vamos a pasar bien tapados. Asimismo, entre abril y octubre encontramos un largo verano bastante caluroso. Así, ciudades como Wuhan, Chongqing o Nanjuing son famosas por ser las tres ciudades más cálidas de todo el país, llamándose así los “3 hornos”.
La mayor diferencia con el norte, es que en el centro de China además hay que contar con una fuerte humedad que nos acompañará todo el año, desde enero hasta diciembre.
En el sur de china el invierno es bastante corto. Encontramos así temperaturas bastante más altas que en el norte o en el centro y que durarán desde enero a marzo. Aun así, no conviene olvidarnos de ropa de abrigo; y es que aunque rara vez los termómetros bajan de los 20ºC, en ocasiones si se experimentan oleadas de frío que se agravan por la humedad y las lluvias constantes.
Encontramos tifones en esta zona más que en otra, así pues, es interesante cerciorarse de las predicciones del tiempo en nuestro viaje, aunque normalmente de julio a septiembre es cuando más probabilidades tendremos de encontrárnoslos.